Según el diccionario de la RAE (ese cementerio tal y como decía Cortázar) la palabra candor tiene dos acepciones diferentes, por una parte significa sinceridad, sencillez, ingenuidad y pureza del ánimo y por otra suma blancura.
Es decir, suma blancura del ánimo, sencilla sinceridad, pura y blanca ingenuidad o suma pureza. Combínense libremente.
Hoy, el candor es una especie en extinción que sólo se conserva en ciertos ecosistemas. El más importante de todos ellos es la niñez y, según parece, al igual que la selva que rodea al Amazonas, se reduce de año en año. Este pequeño animal luminoso cada vez dispone de un territorio menor.
Por eso observarlo en libertad, provoca emociones contrapuestas: extrañeza, al ser conscientes de la rareza de los ejemplares en la vida adulta; ternura por todo el cariño y cuidado puesto en su conservación en un hábitat hostil; y pena porque acabará por desaparecer, con la columna vertebral quebrada, cuando alguno de sus depredadores naturales lo olfatee en el aire.
Pero mientras sucede lo inevitable, disfrutemos mirándolo. Tan blanco, tan puro, tan ingenuo, tan limpio.
Tan en peligro.
4 comentarios:
Yo creo que deberíamos conservar siempre un poco de candor. Es más, sin esa inocencia un tanto pueril creo que estaríamos perdidos. Siempre me he dicho que el día que Madrid deje de sorprenderme, huiré de aquí como alma que lleva el diablo.
Besotes (también me gustan los videojuegos pixelizados, ay, qué locura de años). C.
A mí se me extinguió eso, el candor, por eso trato de educar a mi hijo de manera tal que nadie, ni siquiera él mismo, se lo arrebate.
Un beso.
Hola calamity,
Sí, es cierto lo que dices, pero el candor adulto (y absoluto) es diferente. La vida te va enseñando que es mejor ser precavido, acabas por segregar un caparazón, un exoesqueleto que te protege.
Y hay gente que cree que no lo necesita (admirable) y que espero no lo echen de menos nunca (o lo lamentarán)
Y sí, qué locura de años y larga vida a Space Invaders. :-D
May,
Desgraciadamente, creo que eso desaparece con el tiempo, queramos o no. Y, de algún modo, es bueno que así sea. Yo no creo que el mundo sea un sitio demasiado agradable y la naturaleza humana no me provoca, lo que se dice, mucha confianza, la verdad.
Un saludo
Xavie
Precioso texto, Xavie (ya ves que me estoy poniendo al día).
Un abrazo.
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