miércoles, diciembre 29, 2010

Siroco

«Cuando sopla el siroco, la piel humana transpira y los pómulos relucen en las caras bañadas de sudor opaco, por las que un vello oscuro disemina una sombra sucia y mórbida en torno a los ojos, los labios y las orejas. Incluso las voces suenan pastosas e indolentes, y las palabras adquieren un sentido distinto al habitual, un significado misterioso, como si pertenecieran a una lengua prohibida. La gente camina en silencio, como oprimida por una secreta angustia, y los niños pasan largas horas sentados en el suelo, sin hablar, mordisqueando cortezas de pan o piezas de fruta cubiertas de moscas, o contemplando las paredes resquebrajadas donde aparecen esas inmóviles lagartijas que el moho cincela en el revoque viejo. En los antepechos de las ventanas arden claveles humeantes colocados en jarrones de arcilla, y una voz de mujer surte ora aquí ora allá, cantando; su canto vuela lento de ventana en ventana, y se posa en los antepechos como un pájaro exhausto.»

La piel. Curzio Malaparte.

Ahí es nada.

lunes, diciembre 27, 2010

Bárbaros

«Poco a poco me fui enterando de que, muy acertadamente, la Sociedad para la Eliminación de las Costumbres Salvajes le había confiado la misión de hacer un informe que le sirviera en el futuro como guía. Y lo había escrito. Yo lo he visto, lo he leído. Era elocuente, vibrante de elocuencia, pero demasiado idealista, a mi juicio. Diecisiete páginas de escritura apretada había llenado en sus momentos libres. Eso debió haber sido antes de que sus, digamos nervios, se vieran afectados, y lo llevaran a presidir ciertas danzas a media noche que terminaban con ritos inexpresables, los cuales, según pude deducir por lo que oí en varias ocasiones, eran ofrecidos en su honor. ¿Me entendéis? Como tributo al señor Kurtz. Pero aquel informe era una magnífica pieza literaria. El párrafo inicial sin embargo, a la luz de una información posterior, podría calificarse de ominoso. Empezaba desarrollando la teoría de que nosotros, los blancos, desde el punto de evolución a que hemos llegado "debemos por fuerza parecerles a ellos (los salvajes) seres sobrenaturales: nos acercamos a ellos revestidos con los poderes de una deidad", y otras cosas por el estilo... "Por el simple ejercicio de nuestra voluntad podemos ejercer un poder para el bien prácticamente ilimitado", etcétera. Ese era el tono; me llegó a cautivar. Su argumentación era magnífica, aunque difícil de recordar. Me dio la noción de una inmensidad exótica gobernada por una benevolencia augusta. Me hizo estremecer de entusiasmo. Las palabras se desencadenaban allí con el poder de la elocuencia... Eran palabras nobles y ardientes. No había ninguna alusión práctica que interrumpiera la mágica corriente de las frases, salvo que una especie de nota, al pie de la última página, escrita evidentemente mucho más tarde con mano temblorosa, pudiera ser considerada como la exposición de un método. Era muy simple, y, al final de aquella apelación patética a todos los sentimientos altruistas, llegaba a deslumbrar, luminosa y terrible, como un relámpago en un cielo sereno: "¡Exterminad a estos bárbaros!»

El corazón de las tinieblas. Joseph Conrad.

jueves, diciembre 23, 2010

Inauguración

Y cuando quiso advertirlo, había una nueva librería en la ciudad. Y era suya.

Qué cosas.

lunes, diciembre 06, 2010

La independiente

Estimado Xavié,
Me vas a permitir, por una vez al menos, hacerme con tu blog y hablar de algo que me importa a mí. Sé que, en el fondo, también te importa a ti pero te conozco y te gusta hacerte el desengañado y el cínico fino y no quiero que lo fastidies. Disculpa la sinceridad pero nos conocemos desde hace tiempo.

Hola. Soy Javier.

El que está detrás, a este lado de la pantalla.

Abro una librería en el centro de Madrid. En la calle Espíritu Santo 27 y se llamará La independiente. Estará especializada en editoriales independientes, de esas que se dedican a esto de los libros por amor al oficio, aunque ahora estas dos palabras juntas suenen tan raras.

El caso es que tendré libros bonitos, y unas mesitas para poder elegirlos con tranquilidad tomando un café.

Os mantendré informados del día de la inauguración. Ya queda poco.

Gracias, te devuelvo tu blog.

Ya era hora. A quién se le ocurrirá hoy en día hacerse librero. Habrá que ser imbécil.