Cuando caminamos, no prestamos atención al hecho de caminar. Nuestro cerebro automatiza los comportamientos habituales. Pero hay que tener cuidado. Cuidado de no dejar que vivir se convierta en eso, en un comportamiento automatizado.
Cuando caminamos, no prestamos atención al hecho de caminar. Nuestro cerebro automatiza los comportamientos habituales. Pero hay que tener cuidado. Cuidado de no dejar que vivir se convierta en eso, en un comportamiento automatizado.
2 comentarios:
querido, te recomiendo revisar el trabajo de Antonio Damasio "El error de Descartes", en el que nos demuestra el fallo del "Pienso luego existo" y revoluciona con el "Existo luego pienso". Afortunadamente, el cerebro automatiza el máximo de procedimientos para que podamos vivir, porque... cómo podríamos dedicarnos a disfrutar de la vida si tuvieramos que organizar al corazón, al higado, al pancreas? Y fíjate que son éstos, los procesos automatizados, los que menos fallan. Besos (de la misma anonima que conversó con Alcubierre).
Hola otra vez, entonces.
Gracias por la recomendación, y como no soy Juan José Millás (ni siquiera ahora que ya está bastante visto) no voy a sacarle punta al control del páncreas como leif motif. :-D
Por cierto, ¿te conozco?
Un saludo,
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